domingo, 14 de octubre de 2012

LA VASIJA AGRIETADA


Un cargador de agua tenía dos grandes vasijas que colgaban a los extremos de un palo que él llevaba encima de los hombros. Una de las vasijas tenía una grieta, mientras que la otra era perfecta y entregaba el agua completa al final del largo camino a pie desde el arroyo hasta la casa de su patrón.

Cuando llegaba, la vasija rota solo contenía la mitad del agua. Por dos años completos esto fue así diariamente. Desde luego la vasija perfecta estaba muy orgullosa de sus logros, perfecta para los fines para la cual fue creada; pero la pobre vasija agrietada estaba muy avergonzada de su propia imperfección y se sentía miserable porque solo podía conseguir la mitad de lo que se suponía debía hacer.

Después de dos años le habló al aguador diciéndole: "Estoy avergonzada de mi misma y me quiero disculpar contigo"...¿Por qué? le preguntó el aguador.
"Porque debido a mis grietas, solo puedes entregar la mitad de mi carga. Debido a mis grietas, solo obtienes la mitad del valor de lo que deberías."
El aguador se sintió muy apesadumbrado por la  vasija y con gran compasión le dijo: "Cuando regresemos a la casa del patrón quiero que notes las bellísimas flores que crecen a lo largo del camino. 

Así lo hizo y en efecto vio muchísimas flores hermosas a todo lo largo, pero de todos modos se sintió muy apenada porque al final solo llevaba la mitad de su carga. El aguador le dijo: "Te diste cuenta de que las flores solo crecen en tu lado del camino?; siempre he sabido de tus grietas y quise obtener ventaja de ello, siembro semillas de flores a todo lo largo del camino por donde tu vas y todos los días tú las has regado. Por dos años yo he podido recoger estas flores para decorar el altar de mi Madre. Sin ser exactamente como eres, ella no hubiera tenido esa belleza sobre su mesa."

Cada uno de nosotros tiene sus propias grietas. Todos somos vasijas agrietadas, pero si le permitimos a Dios utilizar nuestras grietas para decorar la mesa de su Padre......

"En la gran economía de Dios, nada se desperdicia". "Sólo aquel que ensaya lo absurdo es capaz de conquistar lo imposible". Si sabes cuáles son tus grietas, aprovéchalas, y no te avergüences de ellas.

lunes, 8 de octubre de 2012

El sueño de thania ...

Había una vez una niña muy humilde, llamada Thania, que vivía en un Barrio llamado Simón Bolívar, ubicado en alguna población de Venezuela.
Ella acostumbraba ir todas las tardes a un asilo donde trabajaba su tía. Thania, con sólo diez años de edad, ayudaba a su tía con las labores del asilo.
Pero un día, Thania soñó en construir una escuela para los niños pobres y un asilo para ancianos.
En la mañana, muy emocionada, le contó a su madre lo que había soñado.
Pasaron los días, los meses, los años, y Thania seguía creciendo. Tan aguda como la sal, tan sana como los vientos y tan viva como el mar.
Al fin llegó el día en que Thania se iba a graduar de Arquitecto.
Thania seguía con su sueño.
Al cumplir 35 años, Thania se prometió que seguiría su sueño y que lo haría realidad.
Pasaron nuevamente los días, los meses, los años, hasta que culminó la construcción de la Escuela y el Asilo.
Thania cumplió 100 años. Al ver que ya había realizado todos sus sueños, le dijo a sus hijos, nietos y bisnietos que ya no le quedaba más por hacer en la tierra, y que era hora de partir.
Thania murió de un paro cardíaco mientras dormía, con una sonrisa dibujada en su rostro.
Demás está decir que a la Escuela le colocaron el nombre de “Thania Rojas”, y al asilo el de “El Sueño de Thania”.

jueves, 4 de octubre de 2012

No desistas

No me rendiré, jamás. Si la vida se trata de ver que tan fuerte eres o cuanto puedes soportar... Tendré que superarlo de alguna manera, porque todo siempre ha sido difícil, y todo seguirá así. Nada es sencillo, nada es simple, y estoy seguro de que nada cambiará. La vida plantea todos los días desafíos, y si eres capás de superar esos desafíos, eres capás de cualquier cosa.